miércoles, 13 de abril de 2011

El porqué no.

       Hola a todos de nuevo,  debido al exitazo del blog (dos visitas en los 3 primeros días, yuju¡¡¡)  he decidido continuar con esto para ver hasta donde se puede llegar. Es verdad que cuando decidí arrancar el blog fue el día previo a las Paellas universitarias, y el día de después pocos estarían dispuestos a leer siquiera el prospecto de las aspirinas. A pesar de esas pocas visitas iniciales hay gente me ha pedido que siga, y yo sigo.

         En esta ocasión quiero cubrirme un poco las espaldas, en vista de lo que en un presente o futuro pueda aparecer escrito por aquí. La decisión de empezar el blog tal vez la explique al completo en otro momento; por ahora creo que me limitaré a descartar posibilidades de el porqué.

         Tal vez, lo primero de lo que se debe de hablar  y de lo que menos me apetece, es de aquello que se hace llamar Ego. Cuando a uno se le termina de ir la cabeza y decide “compartir” con desconocidos (de momento os conozco a todos pero bueno…) pensamientos, reflexiones u opiniones personales, se expone a que esas mismas personas con las que comparte sus pensamientos, generen los suyos propios. Puede que sea así o tal vez no, (ojala sea lo segundo) pero de las primeras impresiones que uno debe de tener han de ser: - ¿ A que se debe esto?; - ¿ que necesidad tiene de contar este lo que sea?, - ¿piensa que sus ideas son mejores que la del resto, o son tan importantes para que alguien quiera estar pendiente de estas?. De momento la única respuesta  que tengo a esto es, que no pretendo  posicionarme por encima de nadie,  a día de hoy  da igual lo que escriba aquí; ni soy, ni seré un erudito del siglo XXI  que haya  venido a mostraros el camino correcto a seguir. Tampoco me convertiré en un filósofo que  derrumbe  los pilares actuales de la sociedad y convierta este en un mundo mejor;  si somos sinceros  no importa lo que ponga, porque mañana, pasado y al otro me tendré que levantar bien temprano, esperar a que el autobús pase, hacerme un hueco en él, pasar buenamente como se pueda entre 4 y 6 horas de clase, volver a coger el bus y llegar a casa para continuar haciendo cosas.

         Puede que la noche anterior haya estado despotricando sobre política, hablando de cómo se aprovechan de nuestra ignorancia, puede que comentase algo sobre  de cómo nos comportamos las personas frente a ciertas cosas, tal vez esa noche escribí  algo  curioso que hubiese pasado en el autobús, de lo bien que lo pasé el fin de semana haciendo esto o aquello, pero a la mañana siguiente no habrá nadie esperándome para darme ningún premio Pulitzer, y si me apuráis ni una palmadita en la espalda (tal vez Dani se anime a darme una antes de clase de hormigón. Haré lo mismo de siempre, con la gente de siempre.

         Ya he dicho al principio  que esta vez no tocaba hablar sobre el porqué del blog, que hoy tocaba dejar claro que cosas no pretendo; no pretendo que aquello que ponga aquí le guste a todo el mundo, tampoco pretendo dar lecciones de moral a nadie porque yo hago, digo y escribo todas y cada una de las cosas que me apetecen contar y tengo la libertad de borrarlas, reescribirlas y volver a borrarlas otra vez, si lo que he escrito no me apetece compartirlo. Aún así, siempre estaré dispuesto a compartir mis pensamientos con los lectores, para abrir sus mentes, y al mismo tiempo abrir la mía para aprender de los pensamientos que ellos compartan conmigo.


PD: Hoy tal vez  me ha quedado muy serio, pero no será siempre así; podéis estar tranquilos.
PD2: Muchas gracias por la insistencia  de que subiera cosas nuevas aquí, aunque haya sido de mentira yo tengo buena fe y me fío de vosotros.
PD3: Perdón por el testamento y el coñazo, a la próxima ya entraré a saco con algún tema en concreto :D
PD4: Que no, que es broma, ya no hay más posdatas.

HASTA LA PROXIMA LOCOS¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡

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